02 junio 2006

MAQUIAVELO EN LA MONCLOA

¿El fin justifica los medios? Bien, entonces aplaudamos los GAL, el dopaje en el ciclismo, el “písalo” en el fútbol, la clonación sin límites, las puñaladas traperas en la oficina y, en general, el marica el último. Y no quiero oír ni una queja.
Entiendo perfectamente la postura de algunos de mis interlocutores de aquí y de fuera, y no pongo en duda su buena voluntad. Demasiadas muertes, demasiado tiempo, demasiado dolor y, por fin, una luz al final del túnel. Me repugna, sin embargo, la de aquellos supuestos líderes de opinión, intelectuales o representantes del mundo de la cultura que jamás han mostrado la más mínima compasión o solidaridad con las víctimas del terrorismo y que ahora se autoproclaman adalides de la paz. A los primeros les digo: sí, lo sé, la tentación de pasar página es muy fuerte... pero, lo siento, a mí se me hace insoportable ese “como sea” que es la única fe conocida del presidente del Gobierno.
Por supuesto que Zapatero tiene derecho a intentarlo, pero no a saltarse la legalidad, a mentir como un bellaco y a tomarnos por imbéciles. ¿Hablar? Sí, pero no seguir el libro de ruta de los asesinos. Después de engañar a Rajoy por enésima vez -y, de paso, a todos los españoles, incluso a los que sestean en espera del Mundial-, en la recta final del debate sobre el estado de la nación autorizó a los socialistas vascos a dialogar con Batasuna, que según el Tribunal Supremo es ETA y, por lo tanto, está fuera de la ley. Esto supone un cambio de criterio esencial en lo que ha predicado el Gobierno hasta la fecha: antes del abandono de las armas, antes de que la “izquierda abertzale” -nueva denominación de la pandilla basura- haya siquiera amagado con condenar la violencia, arrepentirse de los crímenes y pedir perdón a las víctimas, el presidente legitima a Otegi y Permach como interlocutores. Después de la que ha montado, ha reculado un poco: no, si yo no he dicho diálogo (el caso es que está grabado, Zetapé, pero en fin, ya conocemos tu patología), he dicho que Patxi los sondee un poco a ver si se hacen buenos. La poco sospechosa Maite Pagazaurtundua, presidenta de la Fundación Víctimas del Terrorismo, le ha dicho que esa iniciativa es inconstitucional.
“Primero la paz, y luego la política”, dijo el personaje en sede parlamentaria. Yo no me fío de este defensor de una cosa y de la contraria, ni creo en la doctrina de Maquiavelo, ni siquiera para dar carpetazo al terrorismo.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Últimamente los que participamos en tu blog tenemos una especie de querencia taurina a irnos al mundo de la política cuando nos hablas de fútbol. Ya sabes cuál es mi opinión al respecto por mi intervención en tu post “Voy con el Barça”. Hoy para llevar la contraria me iré de la política al fútbol sobre un comentario que escuché ayer sobre el zaherido D. Mariano y acerca de su discusión con el presidente del Congreso: “En la Cámara como en el fútbol sólo discute con el árbitro el equipo que va perdiendo”. Con ello te doy pie para comentar otro tema sobre el debate del estado de la nación. O ¿éste no te gusta?

Riddleman

Mike Muddy dijo...

Yo debato sobre lo que haga falta. Para mí, hay tres temas esenciales de discusión, que también lo fueron en el debate sobre el estado de la nación: el alto el fuego de ETA y el llamado "proceso de paz" (ya está suficientemente explicada mi postura; añado hoy una frase de Rosa Díez: "Patxi López se sentará con los que daban chivatazos para matarnos"); el asunto territorial (también he expresado mis puntos de vista en varios post) y la inmigración. Zapatero narcotizó a Rajoy en los días previos al combate con el asunto de la tregua (algo que no habla muy bien del líder de la oposición y que, probablemente, le hizo perder el debate y los nervios) y recuperó dos prácticas habituales: sacar a pasear la foto de las Azores y echar la culpa al PP del drama de la inmigración ilegal. No sé cuánto tiempo va a utilizar el PSOE el recurso de la famosa foto, supongo que de por vida, lo cual validaría que el contrario le afease otros sucesos no muy lejanos, como los GAL y la apoteosis de corrupción, las dos puñaladas (con el timo de la OTAN)que me hicieron abandonar a la supuesta "izquierda progresista" de este país. Lo de la inmigración es de aurora boreal. Desde luego que el PP no se enteró de nada en su época, y lo he dicho aquí varias veces, pero quien gobierna ahora es el PSOE, que se dedica a poner parches en lugar de afrontar el problema con seriedad (última entrega: Senegal suspende las repatriaciones tras recibir el primer centenar de expulsados, que llegaron a Dakar esposados y engañados -se les dijo que viajaban a Málaga-).

Anónimo dijo...

Mariano tiene cara de ir perdiendo, yo también lo veo claro. El Gobierno hablará con Eta, y el PSOE con Batasuna, y... hasta que se rompa la cuerda, como lo hicieron los demás antes y como lo harán los que vengan si esto también fracasa. Siempre es casi lo mismo. Lo único que cambia es quién se escandaliza. Las vueltas que da la vida, por cierto. ¿A quién ha beneficiado ahora la ley de interés general de Cascos?