21 julio 2012

CRÓNICA SENTIMENTAL DE UNOS FUTBOLEROS EX PERDEDORES

“Tickets for the football, the cheapest tickets for the match”. Finales de junio de 1982. El sol cae a plomo sobre el paseo de los Melancólicos, junto al Vicente Calderón, y tres adolescentes sudorosos y desesperados intentan colocar unas entradas para ver los partidos del grupo 4 de la segunda ronda del Mundial de fútbol que se celebra en Madrid. No son aprendices de reventa, sino víctimas del síndrome Naranjito, una enfermedad que brotó aquel verano y cuyo remedio no se hallaría hasta casi tres décadas después. Tomó el nombre de la mascota más ridícula y peor dibujada de la historia. Sus síntomas: desilusión, desesperanza, abatimiento, descreimiento, cara de loser (a veces de tonto, en ocasiones de las dos cosas), melancolía... La calle que rodea el estadio del Manzanares no podía tener otro nombre más apropiado para describir el ánimo de aquellos chicos que habían invertido sus ahorros de todo el curso en unas entradas para ver a España, que entonces no era La Roja, aunque vistiera de rojo, y a los que cambiaron el programa a traición... (para leer más, pinchad aquí).