PREOCUPACIONES DE LOS ESPAÑOLES

Siempre me ha llamado la atención la socorrida preguntita de los barómetros sobre las preocupaciones ciudadanas: primero, por las respuestas de una sociedad que está elaborando un mapa detallado de su ombligo. Segundo, porque se supone que los políticos deberían hacer algo al respecto (abandonemos toda esperanza). Pero vayamos al primer punto, que es lo que importa. Según el último sondeo del Centro de Investigaciones Científicas (CIS) los principales quebraderos de cabeza de los españoles son, por este orden, el paro (citado por el 40,1 por ciento de los encuestados), la inmigración (40 por ciento), el terrorismo (25,4) y la vivienda (25,1). No dudo que estemos ante cuestiones importantes, pero me sorprende que mis elecciones -en el caso de que alguna vez alguien me preguntara- no salgan en la lista o aparezcan en el furgón de cola: la pobreza y los problemas medioambientales. Se ve que la muerte de miles de personas al día a causa del hambre y las guerras no alcanza la orilla de nuestras conciencias. El calentamiento global y la destrucción del planeta son citados por el 1,6 por ciento de los encuestados; algo es algo, teniendo en cuenta que los mensajes apocalípticos ya no son patrimonio de “ecologistas coñazo” y los científicos han dado la voz de alarma. Como dice Thomas Friedman, tres veces ganador del Pulitzer, refiriéndose a este mundo globalizado: “La Tierra es plana”. Parece que la mirada de la mayoría también lo es.