CAMPAÑA

Francamente, me importa un bledo si los debates entre Zapatero y Rajoy los modera Campo Vidal o el sursuncorda, porque no pienso verlos. Como tampoco los informativos, tertulias periodísticas y espacios gratuitos de campaña. Llevamos con esta monserga desde el 14 de marzo de 2004, cuando al PP se le quedó cara de tonto: más le hubiera valido un despeño gastrointestinal que esta pesadísima digestión. Y del admirado presidente, qué decir: lleva sin gobernar este país desde, como mínimo, principios de año, a razón de dos "tensos" mítines por día, sin aportar una sola idea solvente. Si pudiera, me iría a ver auroras boreales.