DAVID MECA Y LOS TIBURONES

Me cae bien David Meca. Me parece un tipo decente y simpático que ha conseguido un montón de medallas y de campeonatos para España en natación de larga distancia en aguas abiertas. Competiciones donde hay jueces, por cierto. También ha superado una serie de retos a medio camino entre el deporte y el espectáculo (Estrecho de Gibraltar, Canal de la Mancha, Tenerife-Gran Canaria, Jávea-Ibiza...), una actividad que le ha reportado beneficios económicos a cambio de jugarse la vida y que tiene defensores y detractores, pero siempre testigos. Salvo en la última ocasión, en que Seguridad Marítima obligó a los periodistas a regresar a puerto para evitar un naufragio, ya que había fuerte marejada. Los carroñeros ya tenían coartada: su reciente y fallido intento de cruzar tres veces consecutivas el Estrecho de Gibraltar le ha valido a Meca ataques en la prensa (El Mundo) y una vergonzosa encerrona en televisión, donde le acusaron de montaje. Ocurrió el pasado viernes, en el programa ¿Dónde estás corazón? de Antena 3. Usando cámaras ocultas y sin presentar ni una sola prueba concluyente, con testimonios de algún rival celoso y de denunciantes anónimos, la productora Cuarzo intentó demostrar que el nadador es un tramposo y sus récords no son limpios. La Patiño y demás ralea se tiraron a degüello con la complicidad del presentador, Jaime Cantizano, vomitivo abogado del diablo, eso sí, sin perder la sonrisa. El pobre Meca, que no está acostumbrado a nadar entre esta especie de tiburones, escapó como pudo del trance. La telebasura elevada a la enésima potencia. Mejor le iría no volviendo a estos programas y dedicarse a lo suyo, a nadar entre ballenas (como estos calderones de la foto que le acompañaron en la travesía de Tenerife a La Gomera).