DESCONECTEMOS

En tiempos del "ABC verdadero" (que no era necesariamente un ABC mejor, aunque vendíamos más ejemplares que ahora) Ansón solía encargar la misma portada cada Semana Santa: foto playera con el mensaje "Días de sol y descanso para los españoles", o algo así. La portada (cuyo modelo se repetía en verano) tenía el tufillo paternalista propio de alguien que cree que la historia de España no podría explicarse sin su concurso. De hecho, el tipo estaba convencido de poder dictar la realidad e, incluso, derribar gobiernos (a pesar de la idiotez de sus redactores, que se dejaban seducir por Felipe González). Lo cierto es que, dijera lo que dijera Ansón, en Semana Santa los días eran de atascos kilométricos en las carreteras y (muchas veces) mal tiempo, como ahora, porque hay cosas que no cambian, salvo que el egregio periodista empieza a chochear.
En 2007 estamos en las mismas: Tráfico pide a los conductores una salida escalonada para evitar follones y el Instituto Nacional de Meteorología anuncia lluvias, al menos para los primeros días. Una particularidad: estamos súpercrispados. Apenas nos ha relajado el debate nacional sobre si Zapatero sabe o no lo que cuesta un café. ETA parece dispuesta a atentar de nuevo, en el juicio del 11-M los testigos siguen abonando la teoría de la conspiración y, para colmo, las aves migratorias adelantan su viaje a España por culpa del calentamiento global.
Por favor, desconectemos.