15 febrero 2009

FECHA DE CADUCIDAD

Si me topara con el Boss le diría que se ha precipitado, que la mitad de las canciones de su último álbum, "Working on a dream", son más bien flojas, pero... ¡qué coño!, ¡que siga la fiesta! Como la pelirroja Patti se topa con él a diario puede decirle cosas como ésta: "Pareces un maniaco, huyendo como un loco de, déjame pensar, ¿la muerte?". Y Bruce le contesta: "Es divertido decirlo, pero... ¡tengo fecha de caducidad! Y ese fuego que siento dentro de mí y de la banda es algo que disfruto mucho. Lleva consigo un elemento de desesperación, y también de agradecimiento". Después del concierto de Barcelona pensé, ya está, se acabó, al menos con la E Street Band, la tuneladora del rock capaz de tocar tres horas seguidas y al día siguiente otras tres y así durante meses. Me quedan los discos y los recuerdos, y tal vez alguna visita más, pero en plan tranqui, como en la gira de "Devils & Dust", yo me lo guiso yo me lo como. "No creo que haya habido otro momento en nuestra carrera en el que hayamos tocado mejor que en la segunda parte de esta última gira", confiesa en una entrevista a "Rolling Stone". "Si venías a vernos con un cartel con el nombre de tu canción favorita, incluso una que no hubiéramos tocado en 30 años, esa noche la podíamos tocar. La banda estaba al rojo vivo. La aceptación de que todo tiene su fin, simplemente, hizo que todo el mundo redoblara su compromiso". Huida hacia adelante o no, el caso es que Bruce volverá este verano a España con toda su artillería. Que siga la fiesta. Hasta que el cuerpo aguante. Hasta que cierre el último bar.

No hay comentarios: