17 enero 2010

LEGUINA Y EL PARTIDO ANTISECTARIO

Zapeando ayer acabé recalando en La Noria. No suelo pararme más de dos segundos en este programa de Tele 5 que incluye una tertulia pugilística que apesta a ideología, pero ayer tenían de invitado a Joaquín Leguina, que publica nuevo libro, “La luz crepuscular”, crónica sentimental de la dictadura y la transición con tintes autobiográficos, así que me quedé un rato. Leguina representa el lado sensato, culto y honesto de la izquierda española, en grave peligro de extinción por culpa del zapaterismo rampante y su patulea de incompetentes. Como el primer presidente de la Comunidad de Madrid se aparta de la línea oficial y es crítico con este PSOE de aplausos y silencios, María Antonia Iglesias, recuperada de un amago de infarto tras uno de esos acalorados debates, le acusó de “resentido” y de “bailar el agua a la derecha”. Leguina, al borde de los 70 tacos y de vuelta de casi todo, no perdió la compostura (acto heroico cuando María Antonia está enfrente) y contestó que ser de izquierdas no significa participar en un juego de la oca sectario. “Voy a fundar el partido antisectario y te voy a invitar a participar”, le dijo a la periodista de cámara, a la que revolcó (intelectualmente, se entiende) con una sonrisa en los labios.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Leguina, Solana, Sevilla, Solbes, Almunia,... Son los proscritos del nuevo socialismo, el socialismo de pandereta y proclama populista de ZP.