PAPANATISMO GLOBAL

Los miembros del comité de los Premios Nobel han sufrido un flashforward como en la serie de televisión. Se han desmayado durante un par de minutos y han visto el futuro despejado por el superhéroe Obama: un mundo sin guerras, sin hambre, sin terrorismo, sin enfermedades, sin crisis económica, sin ERES... Con musulmanes y cristianos amancebados, con Bin Laden entre rejas -no en Guantánamo, sino en una prisión española de baja seguridad-, con los océanos llenos de atún y vacíos de piratas, con los restos de Lorca hallados y sacados en procesión, con la prensa triplicando sus ventas. Después de la visión han consultado con Zapatero ("La cuestion no es qué puede hacer Obama por nosotros, sino qué podemos hacer nosotros por Obama") y han decidido dar el Nobel de la Paz al presidente de Estados Unidos por los servicios futuros. Un compañero sugiere que el tipo debe el galardón a su predecesor, George W. Bush, que era tan malo malísimo que incluso si le hubiera cogido el relevo Sauron viviríamos mucho mejor. Llevamos unos días de lo más entretenidos con las decisiones de un puñado de miembros: del COI, del Nobel... En realidad, no hace falta ser muy listo para sacudir este pequeño planeta.